El reiki como fuente inagotable de luz y amor nos permite transitar por la senda espiritual sanando nuestro cuerpo energético y elevando nuestra vibración.
Esta maravillosa experiencia espiritual de llenar de luz todo nuestro entorno nos enseña que la Divinidad penetra a toda la creación por igual, por eso es importante hacer uso de nuestro libre albedrío para tomar decisiones y hacer los cambios necesarios que nos permitan ponernos en contacto con la energía universal que procede de Dios y el reiki nos brinda esta oportunidad desde nuestro primer contacto con él.
Es así como el reiki nos ayuda a superar momentos difíciles y crisis emocionales en nuestra vida, elevando nuestra vibración y manteniéndonos dentro de un aura de amor donde aquellos sentimientos de odio, rencor envidia, resentimiento, intolerancia y egoísmo no nos puedan perturbar. El amor nos hace invulnerable a estas fuerzas negativas.
En estos momentos de cambios que vive la humanidad el reiki es una poderosa herramienta de acercamiento y contacto con la Energía Universal, con Dios, con nuestro “Yo Superior” y podemos comprender a través de la misma, que todos somos seres humanos con esencia divina y que estamos destinados a expandirnos hacia el amor, reencontrando nuestro lugar en la Conciencia Universal de la cual una vez salimos y a la cual ha llegado la hora de regresar.
Esta cerca el día en que todos los seres humanos nos fundiremos fraternalmente unos a otros con la Conciencia Universal.